Sobre el Profeta Ezequiel




Pensamientos. Filosofía. Teología.

Puerto Rico.

Poesía. Prosa. Ensayo. Cuento. Escritos. Cartas. Origines.

Preguntas. Crítica. Historia. Cine. Maravillas. Valores.

Política. Libros. Ocurrencias. Sentimientos...




martes, 13 de septiembre de 2011

Un poco de filosofía para nuestros estudiantes

Durante los últimos dos meses he trabajado con un proyecto novedoso. Se trata del diseño de un programa coyuntural de filosofía  en el departamento de estudios religiosos los estudiantes del nivel secundario de un colegio católico de nuestro país. No pretendemos realizar un gran taller filosófico, pero si deseamos presentar un panorama general del saber de este clásico campo de estudio. El primer paso lo hemos dado al preparar una breve introducción a la filosofía seguida de un curso de lógica elemental. Esto es una introducción de los principios del razonamiento en la lógica tradicional y moderna conforme al cultivo filosófico de la tradición cristiana para tener una mayor comprensión sobre el objeto de las ciencias y sus métodos de estudios con el fin de poder explicar la relación estrecha entre la fe y la razón.

Tiene como objetivo general despertar en el estudiante el interés por descubrir la verdad y vivir según ella. Además, busca estimular al estudiante a conocer los hábitos de análisis correctos que le permitan desarrollar y perfeccionar sus procesos intelectivos. También, debe provocar que el educando experimente la dimensión práctica de la filosofía en la dimensión de la lógica a favor de una actitud crítica ante el mundo actual. Relacionar la reflexión filosófica de la tradición cristiana con las nuevas formas de explicar las ciencias.

Esperamos, que al desarrollar en el estudiante estructuras intelectuales que le permitan aprender mejor, pensar mejor y comunicar su conocimiento mejor, puedan desarrollar sus potencialidades académicas en las distintas ramas de las ciencias positivas, sociales, administrativas y tecnológicas entre otras. Además, que al entender la luz de la razón como un don divino, puedan con la misma ciencia dar razón de su esperanza.





domingo, 11 de septiembre de 2011

Conmemoración

Hoy es el décimo aniversario del ataque que perpetró el grupo extremista islámico AlQaeda. Recuerdo muy bien el día de los acontecimientos. Me encontraba conversando con un grupo de compañeros de clase en la cafetería de la universidad. Estudiaba el bachillerato en Administración de Empresas con una concentración en Recursos Humanos. Eran los días en los que las ideas empresariales y capitalistas afloraban en el marco de la seguridad de un pasaporte estadounidense.

En minutos, cambió todo el panorama futuro. No sabíamos que iba a suceder de ahora en adelante. No sospechábamos en qué periodo sociopolítico de la história estábamos entrando. No nos imaginábamos cuáles serían las consecuencias ni el proceso de recuperación del proceso vivido. Pero todavía no se había desplomado la primera torre y ya se rumoraba la emergencia nacional y los reclutadores tocaban las puertas y llamaban por teléfono a todos los que participábamos de las Becas Pell. Y cuando ya habían caído las dos torres, todos orábamos en la plaza central del complejo universitario por las víctimas del atentado y por la paz mundial.

Se organizaron muchos grupos de apoyo en la línea de las ciencias sociales y también religiosos. Poco a poco ya no nos reuníamos para dialogar sobre lo acontecido. Luego de varios meses se declaraba la guerra para Afganistán y más tarde a Irak por razones que nunca quedaron evidenciadas. Amén de la paz y la libertad.

Todavía muchos inocentes siguen muriendo: soldados del ejército estadounidense, iraquí y afgano. También siguen muriendo hombres, mujeres y niños a consecuencia de la guerra que más allá de alcanzar la paz y la libertad de los pueblos, buscan el control político y económico del petróleo; quizás.

Hoy muchos se han desbordado a la borda del complejo conmemorativo en donde antes del 11 de septiembre de 2001 estuvieron enclavadas las torres del Centro Mundial de Comercio. Allí recuerdan a todos los que cayeron. ¿Hombres y mujeres víctimas de quién?

¿Quién hoy recuerda y ora por las demás víctimas inocentes que han muerto en las tierras de oriente medio?

Finalmente, quiero concluir esta breve reflexión exhortando a lanzar una bomba de amor, como comentara una amiga en una red social ante la siguiente expresión que escribí esta mañana.

La capacidad destructora de una bomba, la dureza del acero y del hormigón y la fuerza devoradora del fuego; deben hacerle recordar al ser humano; que el mayor poder que poseemos está en amar como Dios nos ama.

jueves, 14 de julio de 2011

¿De quién es la culpa?

Responder esta pregunta es el interés de muchos hombres y mujeres de los medios de comunicación, políticos, sociólogos, profesionales de la salud, religiosos y líderes comunitarios entre otros.

Creo que en el discurso de muchos de ellos media una crítica al débil sistema de seguridad y de justicia de nuestro país. No necesariamente desean resolver el problema, solo buscan a quien culpabilizar para terminar por destruir el sistema al cual aspiran dirigir desde alguna banca, sea en cualquier rama de gobierno, sea la más ventajosa para el lucro y vanagloria de su persona.

Los que con seriedad buscan resolver el problema partiendo de la gran interrogante, puede que tengan una buena y recta intención, pero están errados. Pues, conducirse por un camino incorrecto en la buena gesta de la búsqueda de la verdad, conduce al error. Encontrar una respuesta, todavía no es solución al problema. En mi opinión una respuesta es manifestación de lo mal que se encuentra el sistema actual. Desvela un sistema reactivo, mientras que todos aspiramos a un sistema que se caracterice por su proactividad y por utilizar un lenguaje propositivo en su discurso de política pública en beneficio de toda la sociedad.

El profeta Ezequiel tuvo que afrontar la misma interrogante. Durante el periodo previo a la primera caída de Jerusalén, el profeta le comunicó al pueblo: “A cada uno según su conducta” “Por mi vida, oráculo del Señor, juro que no quiero la muerte del malvado, sino que cambie de conducta y viva” (Ez 18 y 33). Estas son palabras de misericordia y no condenatorias.

En mi opinión, el punto de partida para la reflexión que deben realizar los que desean resolver el problema de violencia, corrupción y crimen en nuestra Isla que se ha acrecentado durante los últimos meses, debe estar en identificar cuáles son los valores que se han perdido, cuya ausencia suscita tales actos.

Es apremiante reconocer que nuestro país se ha perdido el sentido de responsabilidad colectiva. Que haya un sistema con sus tres ramas de gobiernos, departamentos, agencias, etc.; no significa que el individuo se debe enajenar de la realidad que vive la comunidad. Debe haber una relación estrecha entre el individuo y la comunidad y de la comunidad con el individuo, de la cual ninguna sociedad puede prescindir. De lo contrario, ¿qué tipo de sociedad es?

Esta forma de comprender la sociedad hunde sus raíces en la solidaridad necesaria para la vida comunitaria. Es indispensable para la ayuda mutua. Todos somos interdependientes. Además, esta forma de comprender las relaciones entre los miembros de un grupo humano va más allá del simple fenómeno de la solidaridad, sino que se extiende a todos los aspectos de la vida del grupo. No se puede desvincular del pasado, puesto que también busca construir un devenir. Reconociendo lo que hemos sido y somos; podemos definir cuál va a ser nuestro futuro. Cuando se pierde de perspectiva la solidaridad en la clave de la interdependencia de los seres humanos en la sociedad, se desmorona todo y se pierde la vida. Esto está pasando aquí.








domingo, 10 de julio de 2011

La verdad no se puede matar

La verdad no se puede matar ni se pueda ocultar con acciones organizadas. Mucho menos cuando los planes para callar la voz del profeta provienen de mentes cobardes que no tienen el valor para enfrentar la verdad.

¿Qué problema puede tener este tipo de persona con la voz profética? Él, solo se presenta con una vida equilibrada moralmente y con la palabra que denuncia la injusticia, la opresión y la corrupción en todos sus niveles. Si este es el problema, será mayor cuando escuche las palabras que anuncian la justicia, la libertad y la paz. Claro, este frente es más amplio y de mayor trascendencia.

Se puede callar la voz del profeta, pero la voz de la verdad sobre la justicia, la libertad y la paz nunca se podrá callar. Recordemos que estos valores no provienen del ser humano que es finito en todas sus empresas. Estos valores eternos provienen de Dios y Él dispensa las gracias a hombre y mujeres para hacerlos vivir en medio de nuestra sociedad. Les toca a cada uno de nosotros colaborar por la construcción del Reino. Esto conlleva un precio y una recompensa.

Esto dijo el Señor al profeta Ezequiel:

Me dijo: «Hijo de hombre, ponte de pie, te voy a hablar.» En el mismo momento en que me habla, entra en mí un espíritu y me hace ponerme de pie;
entonces oigo que me dice: «Hijo de hombre, te envío donde los Israelitas, a un pueblo de rebeldes que se han rebelado contra mí; ellos y sus padres me han sido infieles hasta el día de hoy.
Te envío donde esa raza de cabezas duras y de corazones obstinados para que les digas: ¡Esta es la palabra de Yavé...!
Te escucharán o no te escucharán —porque son una raza de rebeldes— pero sabrán que hay un profeta en medio de ellos.
Y tú, hijo de hombre, no les temas, no temas a sus amenazas; serán para ti como zarzas u ortigas, como un escorpión donde te hayas sentado. No tengas miedo de sus palabras, no temas ante ellos: ¡no son más que una raza de rebeldes! Les transmitirás mis palabras, te escuchen o no, porque son una raza de rebeldes.

(Ezequiel 2, 1-7)

Homenaje póstumo a una voz profética de Latinoamérica


Rodolfo Enrrique Facundo Cabral
(1937-2011)






martes, 5 de julio de 2011

EN MEDIO DE LA JORNADA

¡Saludos!

Amigos:

            Una colega y bloguera me comentó que me había quedado en el Poema luego de la lluvia. Quizás tenga razón, si lo reflexionamos desde una perspectiva metafórica en la clave de las experiencias vividas durante el pasado mes de junio. Sin embargo, si lo entendemos desde la realidad climatológica que hemos vivido, pues merece una comprensión literal, puesto que  hemos estado bajo la lluvia por muchos días. No obstante, quiero comunicarles, que aunque por un poco más de un mes no había compartido nada con ustedes porque he estado sumergido en un proyecto muy importante para mi carrera docente y profesional.

            Una noticia muy importante, que tal vez, los que me siguen por este medio se han percatado, es que ya se ha cumplido un año desde que se creó este blog. A pesar que el mismo, en su origen quiso tener un enfoque formativo de reflexión y análisis, hemos tratado de mantenernos en esa línea, aunque en ocasiones hemos tenido que publicar algunos temas un poco personales y fuera del enfoque original. Por esto, pedimos disculpas. Por lo demás, estamos muy contentos de trabajar a través de este medio cibernético y nos sentimos de alguna manera realizados, en cuanto que sabemos que ha servido a muchos para su formación y reflexión personal.

            Comenzaremos una nueva etapa a partir de esta publicación, y aunque el estilo no sufrirá cambios considerables, los temas estarán centrado en la experiencia profética que debe vivir un cristiano inmerso en la realidad social de nuestro país en el contexto histórico global.

            Este es el año de la esperanza. Esto es; el año en el que la espera esta fortalecida por la fe en poder realizar la tarea personal correspondiente en la construcción del Reino con amor. Ha sido un año de mucho esfuerzo y trabajo. Se ha hecho camino recorriendo rutas extensas y dificultosas. Se ha rotos muchos esquemas pesimistas y se colaborado en la formación académica, humana y espiritual de muchas personas.

            Al final de la jornada, en el filo de una nueva etapa, damos gracias a Dios por el don del conocimiento y por haber tenido a bien, haberme considerado para su servicio (1Tim). La satisfacción que siento por el trabajo realizado y lo que significa para mi toda esta faena está plasmada en el himno de las vísperas del martes de la segunda semana del salterio.


MENTES CANSADAS

Mentes cansadas,
manos encallecidas,
labriegos al fin de la jornada,
jornaleros de tu viña,
venimos, Padre,
atardecidos de cansancio,
agradecidos por la lucha,
a recibir tu denario.

Llenos de polvo,
el alma hecha girones,
romeros al filo de la tarde,
peregrinos de tus montes,
venimos, Padre,
heridos por los desengaños,
contentos por servir a tu mesa,
a recibir tu denario.

Hartos de todo,
llenos de nada,
sedientos al brocal de tus pozos
y hambrientos de tu casa,
venimos, Padre,
el corazón entre tus brazos,
la frente humilde de delitos,
a recibir tu denario.

Amén.

jueves, 26 de mayo de 2011

Poema luego de la lluvia
(Fragmanto)





Miraba cantar la lluvia
como una fuente al pie de mi ventana
y estallar las gotas en el suelo
como gracias del cielo generoso...

Ahora miro el sol
cantar tras la lluvia
como lumbrera que no se funde
y calentar el día generoso...








domingo, 15 de mayo de 2011

EL BUEN PASTOR… 



 
Evangelio según san Juan 10, 1-10:

En aquel tiempo, Jesús dijo a los fariseos: “Yo les aseguro que el que no entra por la puerta del redil de las ovejas, sino que salta por otro lado, es un ladrón, un bandido; pero el que entra por la puerta, ése es el pastor de las ovejas.
A ése le abre el que cuida la puerta, y las ovejas reconocen su voz; él llama a cada una por su nombre y las conduce afuera. Y cuando ha sacado a todas sus ovejas, camina delante de ellas, y ellas lo siguen, porque conocen su voz. Pero a un extraño no lo seguirán, sino que huirán de él, porque no conocen la voz de los extraños”.
Jesús les puso esta comparación, pero ellos no entendieron lo que les quería decir. Por eso añadió: “Les aseguro que yo soy la puerta de las ovejas. Todos los que han venido antes que yo, son ladrones y bandidos; pero mis ovejas no los han escuchado.
Yo soy la puerta; quien entre por mí se salvará, podrá entrar y salir y encontrará pastos.
El ladrón sólo viene a robar, a matar y a destruir. Yo he venido para que tengan vida y la tengan en abundancia”.


Cada pastor, además de las cualidades que se trazan en el texto del Evangelio según san Juan antes visto, también suelen tener un perro. Los perros ovejeros, no cuidan los corderos, porque los amen, ni tampoco porque quiere que no caigan en un peligro que les pueda ser pernicioso. Los perros ovejeros si les dejan agreden a las ovejas. De hecho, lo que hacen es perseguirlas, ajotarlas hasta llevarlas al encerradero o cepo por orden del pastor. Ellos lo único que les interesa es quedar bien con el pastor, quien les recompensa por el trabajo bien realizado. Así hay muchas personas en nuestra sociedad, escenarios laborales y comunidades cristianas. Lo único que buscan es complacer al dirigente, jefe o pastor. No buscan el bien común, ni buscan el crecimiento colectivo de todos los miembros del grupo. En ocasiones, se visten de corderos para alcanzar lo que desean, cueste lo que cueste, aunque eso conlleve hacer daño a otros o entorpecer el camino a otros. Cuidado con los perros.

Sigamos al Buen Pastor, él nos conoce y nosotros conocemos su voz. Como conocemos su voz, no tan sólo escuchemos, sino que también consideremos el camino que nos muestra. No tomemos otra ruta, puesto que él es la puerta del redil. Él ha venido a darnos vida y vida en abundancia.

domingo, 1 de mayo de 2011

La muerte
de quienes producen la violencia
no es la garantía
para lograr la PAZ.

















 

Que el Señor nos ayude acomprender
que la paz brota del corazón de los seres humanos, pues es un asunto de actitudes y virtudes humanas.
La paz no es el antónimo de la guerra.













Cuando la persona que está afuera no importa…



Clara estaba sentada en la puerta de la casa. Era ya de noche, y la familia esperaba la visita de algunos amigos. Cuando llegó Nicolás, uno de los amigos invitados, se encontró con Clara. Ella lo miraba fijo a los ojos, mientras que él, también la miraba fijo a los ojos como si quisiera saber algo más de ella.

Ella no había sido invitada al agasajo.  Por eso estaba sentada en el zaguán, fuera de la casa, como si su función fuese sólo ser guardián del lugar.  Con ella nadie hablaba al entrar, sólo la miraban y le pasaban por el lado sin intercambio de ninguna cortesía. Ella sólo estaba allí, pero no participaba de ninguno de los temas de conversación de los presentes. Sin embargo, mejor era así, la vanidad de los puntos en discusión sólo ocupaban el tiempo y acompañaban las copas  y el coctel.

Nicolás no entendía. A pesar de que era uno de los invitados especiales, y que participaba de las copas y el coctel, permanecía callado observando la concurrencia. Aunque en varias ocasiones intentó entrar en la conversación, no lo lograba. Claro, era de afuera. No era conocido por la concurrencia. Era distinto al grupo. Como confiar en él. No le conocen, por tanto, no hay razones para hablar con él.

Pero Nicolás sigue siendo él, y Clara sigue siendo ella. Él, sentado solo entre los presentes sin poder intercambiar alguna palabra con nadie. Ella, sentada en el zaguán sola.

“¡Buenas noches tengan todos!” Dijo Nicolás. Se retiraba intentando despedirse de los presente. No pasó nada extraordinario. Salió fuera y estando en el zaguán, frente a la puerta y a la presencia de Clara, silbó. “Linda, toma el último bocadillo.” Dijo a la perra azabache sentada en la puerta. Ella, agitando su cola lo recibió.


!Señor, tú sí nos conoces y nos recibes. Nuestro corazón canta las grandezas de tu presencia en medio de nuestras vidas!



SALMO RESPONSORIAL
Salmo 143

R. Guíame, Señor, por el camino recto.

Señor, tú me sondeas y me conoces:
me conoces cuando me siento y me levanto,
de lejos penetras mis pensamientos;
distingues mi camino y mi descaso. R.

Todas mis sendas te son familiares;
no ha llegado la palabra a mi lengua,
y ya, Señor, te la sabes toda. R.

me estrechas detrás y delante,
me cubres con tu palma.
Tanto saber me sobrepasa;
Es sublime, y no lo abarco. R.

¿A dónde iré lejos de tu aliento,
A dónde escaparé de tu mirada?
Si escalo el cielo, allí estás tú;
si me  acuesto en el abismo, allí te encuentro. R.

Si vuelo hasta el margen de la aurora,
si emigro hasta el confín del mar,
allí me alcanzará tu izquierda,
me agarrará tu derecha. R.






domingo, 24 de abril de 2011

EL SEÑOR HA RESUCITADO
¡ALELUYA! ¡ALELUYA!


Secuencia de Pascua
Ofrezcan los cristianos
ofrendas de alabanza
a gloria de la Victima
propicia de la Pascua.

Cordero sin pecado
que a las ovejas salva,
Dios y a los culpables
unió con nueva alianza.

Lucharon vida y muerte
en singular batalla,
y, muerto el que es la Vida,
triunfante se levanta.

«¿Qué has visto de camino,
María, en la mañana?»
«A mi Señor glorioso,
la tumba abandonada,
los ángeles testigos,
sudarios y mortaja.

¡Resucitó de veras
mi amor y mi esperanza!
Venid a Galilea,
allí el Señor aguarda;
allí veréis los suyos
la gloria de la Pascua. »

Primicia de los muertos,
Sabemos por tu gracia
que estás resucitado;
la muerte en ti no manda.

Rey vencedor, apiádate
de la miseria humana
y da a tus fieles parte
en tu victoria santa.


AMÉN






viernes, 22 de abril de 2011

Ir como amigo a tu lado el día de tu pasión…

No es tu cruz la que llevas al hombro
acuñando el papel redentor.
Esa cruz que lacera tu espalda,
es mi cruz trasformada en tu amor.

Cuando digo, Jesús que te sigo
no es tan sólo por ver tu pasión,
es por ir como amigo a tu lado,
proclamando tu amor con mi amor.

El calvario es camino de muerte
cuando está desprovisto de amor,
pero Tú, recorriendo el camino,
lo convenientes en senda de amor.

Quiero ser cirineo en la ruta
salpicada de oprobio y dolor.
Quiero ser el amigo de siempre
atenuado el dolor con mi amor.

Si mi cruz no te sirve de nada
serviré para ser servidor.
Dame el turno y seré tu relevo,
llevaremos la cruz de los dos.

P. Javier Gutiérrez


Hice esta foto en el lugar de la crucifixion de Jesús y Santo Sepulcro en Jesrusalén
(2006) 






martes, 19 de abril de 2011

Las peregrinaciones durante la Semana Santa


La experiencia Cristiana desde sus inicios, aún cuando la comunidad apostólica todavía recibía las enseñanzas del Señor, es un constante caminar y un ir hacia fuera a encontrarnos con el Resucitado y a anuncia la buena noticia.

Una peregrinación es el viaje o un camino emprendido hacia un santuario o lugar sagrado con importantes connotaciones religiosas. Es también, un viaje efectuado por un creyente o grupo de creyentes hacia un lugar de devoción o un lugar considerado como sagrado según la religión de cada uno.

El término peregrinación proviene del latín peregrinatio y significa viaje al extranjero o estancia en el extranjero. Según los orígenes etimológicos, el peregrino es el expatriado o exiliado. Sea como fuere, es un extranjero desconocido en el país y privado de la asistencia de una colectividad. El desplazamiento, generalmente andando, de los hombres y mujeres hacia los lugares en los que entran en contacto con lo sagrado es una práctica común de todas las religiones y culturas. La peregrinación es un fenómeno casi universal de la antropología religiosa. El peregrino encuentra lo sobrenatural en un lugar preciso, en el que se participa de una realidad diferente a la realidad profana.

El pueblo de Israel caminó para salir de la esclavitud de Egipto. Caminó por el desierto siguiendo la voluntad de Dios hasta llegar a la tierra prometida. Por el camino Dios se fue mostrando y revelando a sus escogidos hasta que se constituyó una nación consagrada a Él.

Jesús también salió a caminar. Caminando anunció la buena noticia y realizó signos para que todos creyeran en él. Caminado cargó la cruz hasta el lugar de la redención.

El peregrino busca la fuente para saciarse: “como busca la cierva corrientes de agua viva, así te anhela mi alma Dios mío” (Salmo 62). Al regreso, el peregrino no se queda para sí con lo recibido, sino que lo comunica a otros.













Los Retiros Espirituales


Los Retiros espirituales, en sus distintas modalidades, han sido utilizados durante siglos por los cristianos para mejorar y crecer en ésta dimensión.
El ritmo de los acontecimientos de todos los días nos introduce fácilmente en un espiral de ruido y ajetreo, que hace difícil detenerse para reflexionar sobre nuestra fe y nos preguntamos: ¿cuál es el vacío que llevo? ¿qué o quién puede dar sentido a mi vida? Es como descubrir un vacío que la abundancia de cosas y la sociedad de consumo que vivimos, no logra calmar.
El corazón del ser humano es un espíritu que nunca acaba de sentirse plenamente satisfecho, ¿qué necesita? Un experto de la antigüedad cuyo desarrollo filosófico y teológico es muy actual, realizó una aventura del corazón para buscarle el sentido a la existencia humana en la clave de la experiencia cristiana. San Agustín, expresó con sencillez la experiencia de su búsqueda: “nos hiciste, Señor, para ti y nuestro corazón estará inquieto hasta que descanse en ti”
Los días de retiro son días de paz y serenidad. La soledad y la tranquilidad libremente buscada, la meditación en torno a la figura y palabras de Jesús, su presencia eucarística en el sagrario hacen posible el diálogo y el encuentro personal de cada una y de cada uno con ese Dios que nos ama tanto.
Tres cosas fundamentales en las que merece la pena invertir una pequeña parte del tiempo de nuestra vida con la ilusión de mejorar y crecer humana y espiritualmente, como hicieron los cristianos de los primeros siglos son: conocer y amar a Jesús, conocernos a nosotros, hacernos capaces de amar de verdad a los demás.







domingo, 17 de abril de 2011

Dos formas distintas de entrar en la ciudad de Jerusalén


Con el Domingo de Ramos damos inicio a las celebraciones anuales de los misterios de la pasión, muerte y resurrección de nuestro Señor Jesucristo. Culminamos el camino que comenzamos a recorrer al inicio de la cuaresma con nuestra oración, nuestro ayuno y nuestras obras de caridad. El fin último de este caminar cuaresmal es celebrar llenos de la gracia de Dios y con el corazón inundados de gozo la Pascua del Señor.

La procesión de ramos que se realiza durante este día es memoria de la entrada que realizó Jesús a la ciudad Santa de Jerusalén al inicio de la celebración de la pascua judía.

Jerusalén está ubicada en la cima del Monte Sión. Es el lugar elegido para construir la ciudad que es signo de la nación santa que Dios ha elegido para él. Al contemplar esta ciudad amurallada, cómo canta el Salmo 121, contemplamos los palacios del Rey David como una prefiguración de la majestad del Reino de Dios instaurado por Jesucristo.

Al leer el texto bíblico según san Mateo que nos sugiere la liturgia para hoy, podemos ver cómo Jesús entra a la ciudad entre aclamaciones de júbilo y gozo, como un rey que entra en su ciudad para tomar su trono. Sin embargo, ésta no es la entrada triunfal de un rey a la que están acostumbrados los judíos. Ellos están acostumbrados al tipo de entrada triunfal al estilo de Poncio Pilatos.

Poncio Pilatos era el procurador de la Provincia de Judea en tiempo de Jesús. Él, vivía en Cesarea la Marítima y todos los años, para la celebración de la pascua judía, se trasladaba con su escolta militar a Jerusalén para aplacar las fuerzas revolucionarias en el caso de que se formara una revuelta judía en contra de las fuerzas imperiales. Su llegada estaba encabezada por el vibrar de tambores y el sonar de las trompetas que anuncian la llegada de alguien importante. Su formación estaba flanqueada por los estandartes de los signos de Roma. Su escota estaba compuesta por su mejores militares que portaban capas, lanzas y espadas para demostrar su invencible fuerza bélica. Su cabalgadura digna de un gobernante que vela por los mejores intereses de un rey. Además, le acompañaba sus bienes,  servidumbre, esclavos.

No obstante, la entrada de Jesús en Jerusalén no se realiza como la de ese tipo de rey. Sin escolta, ni ejércitos, ni lanzas, ni espadas, ni esclavos. En eta ocasión el Rey entra de la forma más humilde, con cantos de alabanzas realizados por los más jóvenes, mujeres y hombres comunes que llevan ramas en sus manos que agitándolas gritan: “¡Hosanna, Hosanna!”. Jesús entra montado en un burro. Su único lujo son los mantos que colocan el suelo al pasar. Viene a cumplir son su misión: implantar el reino y a salvar a toda una muchedumbre.

Podemos compara para nuestra reflexión la entrada triunfal de un gobernante de un reino material y temporal; y la entrada de un Señor de un reino que no es de este mundo. Entonces podemos comprender el canto de la carta de San Pablo a los Filipenses 2, 6-16:

“Cristo, siendo Dios, no consideró que debía aferrarse a las prerrogativas de su condición divina, sino que, por el contrario, se anonadó a sí mismo, tomando la condición de siervo, y se hizo semejante a los hombres.
Así, hecho uno de ellos, se humilló a sí mismo y por obediencia aceptó incluso la muerte, y una muerte de cruz.
Por eso Dios lo exaltó sobre todas las cosas y le otorgó el nombre que está sobre todo nombre, para que, al nombre de Jesús, todos doblen la rodilla en el cielo, en la tierra y en los abismos, y todos reconozcan públicamente que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.”